miércoles, 2 de noviembre de 2011

Diablo Guardián de Xavier Velasco

Llevaba cincuenta paginas cuando pensé en cerrar el libro y botarlo a la fregada...

La verdad ya estaba harto de esa escuincla maldita, también del co-protagonista que se las daba de escritor y de duro, pero a mi me recordaba a algunos parecidos: el lacra de la mosca del cuál varias revistas tenían clones, y por el apodo, cada que lo escuchaba, sonaba la voz del warpig, así que me hartaban por lo que no quería continuar.

De pronto lo entendí: había sido engañado. Por un minuto dejé de leer al escritor y le compre que era una niña babosa la que hablaba, con sus muletillas, sus palabras pochas, su actitud insufrible, tan bien estaba que en ocasiones olvidaba que era un hombre el que escribia esas letras.

Diablo guardian es la historia de una mala mujer, de esas que todos hemos tenido una aunque ésta lo es en demasía, facilona, vanidosa, drogadicta y en fin, ogete, por eso es que no me encantaba leer sus desventuras, por que hace años me vacuné contra ese genero que tanto daño nos hace y me costó hacerlo, por lo que no iba a dejar que me llegara una por donde no podía detenerla; por los libros.

Además, me recordaba mucho a la niña mala de Vargas Llosa, que si bien también cogeaba (con "g") con las mismas patas que Rosalba, por lo menos la otra, se sabía hacer amar, ésta no, solo te hacía odiarla por eso no quería continuar leyendo, luego comprendí lo que pasaba, Velasco había hecho dos antiheroes tan perfectos, que no puedes dejar de odiarlos, al menos eso me paso, seguro habrá algunos que sientan empatía por la escuincla esa y de seguro varias señoras que se vean felices de ver sus sueños frustrados realizados por ella, pero yo no; su servidor disfrutó detestandolos.

A ambos, no solo a la niña, tambien al otro gandul con ese caracter engreído que solo la juventud puede conceder, ese look de, yo veo mejores películas que tu y miren quién se los está diciendo, conforme leía acerca de él, me imaginaba como sería conocerlo, qué argumentos tendría para minimizarlo, para burlarme de sus escritos, éstos dos están tan bien retratados, que se volvieron mis villanos predilectos, hay que conocer a alguién muy bien para odiarlo de verdad.

¿y la historia? cautivante, estoy medio harto de esas novelas que se desarrollan en caminos paralelos para luego encontrarse, pero Veklasco lo hace muy bien, casi no sientes cómo se van acercando de tan gradual que sucede, se pone lento en ocasiones cuándo entra pig a escena, pero la otra siempre te mantiene atento, siempre fiel a su profesión, pues es sin duda quién se lleva el libro pues cómo decía antes, la aborreces cómo deseguro lo terminaron haciendo todos sus mariditos y si es así, es por que también la amaste en algun momento, tal vez no estoy tan bién vacunado como pensaba.

Siendo sincero por momentos se ponía aburrida, su autor lo sabe, por eso se pone a jugar con la manera en que va contando la historia, jugando algún capitulo a las metáforas, otro mas con los pronombres personales y alguna con las imagenes estáticas (postales, pues) demostrando tal maestría que hace lo que se la place con la novela, como la manera en que hace a sus protagonistas espías dobles o triples, pues son patéticos, que a su vez se creen más perdedores de lo que son y uno entiende que lo son más de lo que creen, todo lo cual parece haber sido orquestado eféctivamente, por un demonio.

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